Lecciones no Aprendidas,una Oportunidad

En cada actividad académica que desarrollamos los maestros con nuestros estudiantes, es una lección aprendida, y cada lección aprendida es una pedagogía y una  experiencia maravillosa que debemos poner en práctica para no cometer los mismos errores. Claro está que de ésta huelga de Maestros, debemos sacar lecciones y terminar con dignidad. Nuevamente en las aulas explicar a nuestros estudiantes las razones justificadas de nuestra lucha  y la necesidad de formar buenos ciudadanos con capacidad crítica y reflexiva, a fin de construir una  sociedad justa, democrática  con valores.

Aprendamos de nuestras lecciones e inculquemos en nuestros estudiantes a ser ciudadanos con derechos políticos, sociales y económicos para no cometer los mismos errores. Por ejemplo si los maestros que votaron en las últimas elecciones por el señor Ollanta, pensando que era el salvador y la mejor alternativa para derrogar la Carrera Publica magisterial, considerada como ley anti magisterial y punitiva, una vez más se equivocaron, la mayoría de maestros no han aprendido la lección, ¿Quién les ha dicho que en política existe la verdad?, sabemos muy bien, el Candidato que dice la verdad en su campaña no gana las elecciones, y el que miente y hace demagogia gana las elecciones, solo citaremos algunos ejemplos para ilustrar mejor nuestro comentario. Que paso en 1990 entre el candidato Mario Vargas Llosa, él dijo la verdad que iba privatizar las empresas publicas iba producirse un Shock económico ; mientras que el candidato Alberto Fujimori dijo lo contrario, tecnología, Honradez y Trabajo y termino vendiendo empresas, despidiendo trabajadores, cerrando el congreso y una corrupción generalizada. Por eso la democracia no se fortalece. Otra ejemplo son los congresistas que para ser candidatos deben llenar una declaración jurada de sus bienes patrimoniales, antecedentes profesionales, policiales y judiciales y una vez en el congreso, casi todos tienen un pasado oscuro en su hoja de vida, como dice el refrán “donde se pone el dedo brota pus”, entonces de que honestidad estamos hablando, que ejemplo pueden dar a nuestros estudiantes ; por eso no les interesa la educación del pueblo, la huelga del Magisterio, la perdida de clases con irreparables consecuencias, son escasos los congresistas que se pronunciaron por la ley de Reforma Magisterial.

En mi anterior comento decía que para luchar se necesita Unidad en el magisterio, pero mientras estemos divididos, no podemos esperar mucho de lograr nuestras metas y objetivos de esta Huelga.

Proponemos lo siguiente:

ü  El Ministerio de Educación debe reconocer a todos los sindicatos de profesores que están en huelga y entablar una mesa de dialogo, a fin de consensuar y priorizar las peticiones de los gremios. 

ü  Elaborar una plata forma lucha única donde contemple los requerimientos mínimos de todos los representantes del gremio Magisterial, para negociar con el Ministerio de Educación.

ü  Considerando que la ley de Reforma magisterial va sustituir a las leyes 24029 y 29062, por tanto no puede discriminar a los profesores de la CMP, impidiéndoles a no participar en los dos ascensos excepcionales que convocará el ministerio para los profesores de la ley 24029, una vez aprobada la Ley de Reforma Magisterial. El principio de equidad es oportunidad para todos; por lo tanto no podemos discriminar .por que empezaremos de cero y no podemos seguir abriendo brechas de enfrentamientos entre maestros. Los de CPM queremos que nos evalúen en igual condiciones y oportunidades.

ü  Con motivo de la cumbre que se realizará en Lima los días 1 y 2 de octubre, el gobierno debería mediar en la solución de la Huelga de los maestros y evitar la mala imagen del país ante los ilustres gobernantes del Mundo.

ü  Difundir en todo los medios escritos y televisivos las bondades de la ley de Reforma Magisterial de manera transparente y evitar la satanización de los profesores que están en la CPM, recuerde que la LRM contempla un 70%  del contenido de la CPM.

ü  Respeto a la estabilidad laboral legítimamente ganados.